6.3. Formatos de vídeo
6.3.1. ¿Qué son los formatos de vídeo? La cuestión de la compresión
Aunque nos referimos a los mismos con extensiones como .avi, .mp4, etc., los formatos de vídeo no son realmente formayos. Son más bien contenedores, es decir, como unos paquetes de ficheros que incluyen las imágenes del vídeo, el sonido, indicaciones de cómo descomprimir y sincronizar, en los que puede haber también, por ejemplo, subtítulos.
Como mínimo, un contenedor de vídeo contiene un codificador de vídeo y uno de audio. Un container os permite elegir el codificador de vídeo y el de audio que queráis. De este modo, podéis usar una compresión de alta calidad para la imagen –puesto que consideráis que es importante en vuestro proyecto transmedia–, pero usar MP3 para comprimir el audio porque es secundario.
Para poder ver vídeo en vuestro ordenador, necesitáis codificadores. Algunos codificadores, como DivX, ya vienen directamente con el sistema operativo; otros quedarán instalados al incluir un programa para ver vídeos, y otros tendréis que descargarlos de la web. Normalmente, cuando se necesita un codificador nuevo para ver el vídeo, el programa que está intentando leerlo avisará del nuevo codificador que se necesita. Muchas veces, os ofrecerá el enlace para descargarlo.
Para hacer la tarea más sencilla, encontramos los paquetes de codificadores: software que ya incluye varios codificadores a la vez, y por lo tanto no los tenéis que ir buscando uno por uno. Desgraciadamente, muchos de estos paquetes tienden a crear conflictos con otros programas que tengáis instalados y algunos han sido utilizados para instalar molestos programas de inclusión de anuncios (adware) e incluso software malicioso, y por lo tanto es mejor instalar el codificador concreto que necesitemos. Y, de hecho, con visores de medios como VLC, que ya vienen preparados con una gran cantidad de codificadores, lo más fácil es que no tengáis necesidad de ello.
Las imágenes de vídeo que vienen directamente de una cámara (el formato raw) ocupan una gran cantidad de espacio. De aquí la necesidad de comprimirlo y la existencia de puntos de codificador. El contenedor incluirá, de este modo, audio y vídeo ya comprimidos. El audio estará comprimido en alguno de los formatos que hemos explicado en el apartado 5 «Formatos de audio y su uso».