2. Elementos del dibujo
2.5. Valor, luz y sombra
Es de gran importancia aprender a observar y entender la lógica de la luz y la sombra, por un lado, para ser capaces de representar lo que vemos, pero, quizás más importante, para poder aplicar luces y sombras de memoria.
Las luces y las sombras también pueden ayudarnos a construir nuestros dibujos.
Como explican Crespi y Ferrario, llamamos:
«valor a los grados de claridad u oscuridad que existen entre dos extremos de valor, por ejemplo, blanco y negro. El valor pone de manifiesto un mayor o menor grado de la posibilidad lumínica, ligada esta siempre a la claridad u oscuridad del mismo.»
(Crespi y Ferrario, 1971/1977, pág. 103)
Andrew Loomis dice que hay tres leyes fundamentales en relación con la luz:
- La luz procedente de cualquier foco simple se propaga en línea recta y, por lo tanto, no puede iluminar más de la mitad de una forma redondeada.
- Toda superficie está iluminada según el ángulo que forma con la dirección del haz luminoso.
- Solo las superficies planas pueden estar uniformemente iluminadas, puesto que en las superficies curvas y redondeadas se observa siempre una gradación de tonos (Loomis, 1961/1983, pág. 79).
En relación con el sombreado, Crespi y Ferrario dicen que es el «trabajo que se lleva a cabo teniendo en cuenta la relación de valores claros y oscuros los que guardando la ordenación formal de la luz y sombra, puesta de manifiesto en un objeto iluminado, da como resultado la obtención de sugerencia de volumen en un objeto dentro de un campo bidimensional» (Crespi y Ferrario, 1971/1977, pág. 94). Es importante la puntualización que hacen estos autores en relación con el objetivo del sombreado: la obtención de sugerencia de volumen.
Loomis argumenta:
«Los oscuros y los acentos son, en realidad, la esencia del dibujo, porque son los que se ven al primer golpe de vista. Ellos dan el «impacto» del dibujo. Todo dibujo puede reducirse a medios tonos y oscuros, ya que los blancos están presentes en el papel. De manera que la práctica del buen dibujo, aparte de la construcción y los contornos, exige buscar primero las áreas de luz, y ver después los medios tonos y los oscuros que las rodean.»
(Loomis, 1961/1983, pág. 89)
Conclusiones
Aprender cómo funciona la «lógica de la luz y la sombra» nos permitirá comprender mejor cómo enfatizar ciertos puntos de nuestros dibujos.
Las luces y las sombras también pueden ayudarnos a reforzar la construcción de nuestros dibujos y en la obtención de la sugerencia de volumen.